Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 25 abril 2024.

CCOO considera que el Gobierno fracasa en la Reforma de la Formación Profesional para el Empleo

  • Las medidas que ha llevado a cabo el Ministerio de Empleo han empeorado hasta extremos alarmantes la formación de los trabajadores

La convocatoria estatal de ayudas a la formación, la primera tras la reforma del sistema de Formación para el Empleo, que hoy ha aprobado el Consejo de Ministros con la oposición de los agentes sociales y la mayoría de las Comunidades Autónomas, es un ejemplo más del fracaso del Gobierno en esta materia.

05/08/2016.

El balance del gobierno del PP en Formación para el Empleo no puede ser más calamitoso. En marzo de 2015 aprobó mediante Real Decreto Ley, y por razones de urgente necesidad, una reforma que año y medio después no cuenta con desarrollo reglamentario. Medidas estrella como la cuenta formación, el cheque formación o el permiso retribuido de veinte horas anuales de formación han quedado en nada. Desde 2014 no se ha publicado ninguna convocatoria estatal de ayudas para la formación de trabajadores ocupados, y año tras año no se han venido reanualizando los fondos de formación no gastados lo que ha provocado, entre otras reacciones, la queja al Defensor del Pueblo de varias organizaciones empresariales, a la que se ha sumado CCOO, que reclaman conocer el destino de unos fondos que se detraen de la nómina de los trabajadores y las cotizaciones de los empresarios con el único fin de mejorar su cualificación, pero que el gobierno ha usado para reducir el déficit que sus desastrosas políticas laborales están creando en la caja de la Seguridad Social.

Las dos convocatorias estatales para jóvenes desempleados publicadas por el Gobierno en 2015 se han saldado con sonoros fracasos, pues no se ha conseguido ni siquiera asignar los fondos disponibles. Entre julio de 2015 y julio de 2016 el número de empresas que programan formación para sus trabajadores se ha reducido en un 18,54% y el de Permisos Individuales de Formación en un 62%. Falto de ideas y aparentemente convencido de que los agentes sociales son el enemigo a batir, las medidas que ha llevado a cabo el Ministerio de Empleo han empeorado hasta extremos alarmantes la formación de los trabajadores.

El último episodio ha sido la aprobación de la convocatoria de oferta para trabajadores ocupados de 2016 que cuenta con un presupuesto de 250 millones de euros procedentes de la cuota de Formación Profesional. Tras la aprobación, el pasado 12 de mayo en el Patronato de la Fundación Estatal para la Formación en el Empleo, de una propuesta de convocatoria, la Administración introdujo unilateralmente modificaciones de profundo calado que desvirtúan por completo el espíritu del texto original y dejan patente el desprecio del Gobierno del PP al diálogo social.

En una nueva reunión del Patronato celebrada el 29 de julio, solicitada de urgencia por empresarios y sindicatos, la Administración General del Estado dio por buena, con la oposición de la mayoría de las comunidades autónomas, CCOO, UGT, CIG, CEOE y CEPYME la nueva versión de la convocatoria en la que se excluía a los agentes sociales del Órgano Colegiado que informa los planes de formación.

Esta exclusión no puede explicarse en términos legales y es indefendible en términos políticos. La Audiencia Nacional y el Tribunal Constitucional han considerado en sendas sentencias que la presencia de empresarios y sindicatos en este órgano es ajustada a derecho. La Ley de 30/2015 ordena “la participación de los agentes sociales en la gobernanza del sistema y en particular el diseño, planificación, control, seguimiento y evaluación de la oferta formativa, especialmente la dirigida a los trabajadores ocupados”. Pero además, el Servicio Público de Empleo Estatal tiene mayoría absoluta en el Órgano Colegiado, de manera que los interlocutores sociales no tienen capacidad para modificar ninguna propuesta; de hecho, ni siquiera pueden determinar el sentido del informe no vinculante que emite este órgano: varios son los casos en los que CCOO nos hemos manifestado contrarios a las propuestas de aprobación de varios expedientes sin que la Administración haya cambiado finalmente el sentido de su informe.

Para CCOO, y así lo hemos denunciado reiteradamente, el Gobierno parece que tiene como único objetivo que no haya testigos, controles, ni seguimiento real de la formación para el empleo que se financia con la cuota de trabajadores y empresas.