Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 23 abril 2024.

Construyendo otras cadenas de valor desde el

Productos forestales no maderables

    17/01/2017. Imagen cedida por CONAMA 2016
    CONAMA 2016 M.Sanz

    CONAMA 2016 M.Sanz

    Uno de los principales problemas detectados es la alta fragmentación de la propiedad forestal; en el caso de la propiedad forestal privada el tamaño medio de las explotaciones en Castilla y León es de 3 Ha, lo que hace difícil la rentabilidad de las mismas. Para hacer frente a esto se propone favorecer el asociacionismo de los propietarios forestales que permita gestionar superficies mayores y más rentables. Así como promover cooperativas o fórmulas de economía social vinculadas al territorio que además fijen población y dignifiquen y reconozcan las labores forestales. Este tipo de iniciativas, como pueden ser Bancos de Tierras, Montes de Socios, experiencias de custodia del territorio, etc. tienen una serie de efectos sinérgicos sobre la economía local, el desarrollo rural y la sostenibilidad de los bosques, que las hacen especialmente interesantes.

    El empleo del sector forestal, y en concreto el vinculado a estas actividades, es bastante precario, presenta una fuerte estacionalidad, una amplia brecha de género y la falta de regulación provoca un alto índice de trabajo sumergido que no cotiza ni tiene derechos. Sería deseable promover la integración de diferentes actividades forestales, de cara a permitir una estabilidad temporal y de ingresos en el empleo de este colectivo.

    Otro aspecto importante a tener en cuenta es la formación específica en el sector forestal, que necesita de un impulso y un aumento en Castilla y León, adaptándola a las necesidades y potencialidades de cada territorio, sobre todo de la formación básica (FP Básica y módulos de competencias profesionales).

    Más allá de las barreras que presenta el impulso de estos productos y de las acciones que se puedan tomar para potenciarlos, lo cierto es que suponen una oportunidad clara como nicho de empleos verdes, dignos y con derechos; así como para el desarrollo de zonas rurales en las que se aúne la explotación sostenible de los recursos con la conservación de los bosques y los ecosistemas, puesto que al final un aspecto depende del otro, no puede haber una explotación a largo plazo en bosques esquilmados y destrozados, así como es más complicada la conservación de los montes en lugares con problemas para aprovechar sus recursos forestales.