Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 16 abril 2024.

La opacidad con que el Gobierno está gestionando el programa de Garantía Juvenil es absoluta, en opinión de Jóvenes CCOO

"El fracaso de la Garantía Juvenil no tiene que ver con el desinterés de los jóvenes sino con la gestión del Gobierno"

    Pese a las reiteradas solicitudes del movimiento sindical y de la Comisión Europea, el Gobierno español continúa evitando explicar cuántos jóvenes se han beneficiado del Sistema Nacional de Garantía Juvenil y si lo han hecho a través de contratos de trabajo, programas de formación o prácticas.

    14/10/2015.

    14 de octubre de 2015

    Sólo 119.514 de las 1.395.400 personas paradas menores de 30 años que figuran en la última Encuesta de Población Activa (EPA) se han dado de alta y han sido aceptadas en el registro del Sistema Nacional de Garantía Juvenil. El 8,6 por ciento de la juventud desempleada. Y de esas 119.514 personas, nadie sabe cuántas han sido atendidas, en cuánto tiempo (de acuerdo con la propuesta inicial de la Comisión Europea, las ofertas debían llegar en menos de cuatro meses desde la inscripción) y para recibir qué tipo de propuesta laboral, formativa o de prácticas y en qué condiciones.

    La opacidad con que el Gobierno está gestionando el programa de Garantía Juvenil es absoluta, en opinión de Jóvenes CCOO, y a tenor de los únicos datos disponibles ni siquiera parece que esté siendo capaz de resultar atractivo y útil a un número significativo de jóvenes potencialmente beneficiarios. De hecho, la propia Comisión Europea aseguró en su última evaluación del Sistema Nacional de Garantía Juvenil español que este programa “debe demostrar aún su eficacia para estimular el empleo de los jóvenes”, dado que sólo un “número limitado” de las personas a las que va dirigido “se han registrado en el sistema”.

    Esta situación implica que España podría no utilizar y, en consecuencia, perder los 1.887 millones de euros que la Unión Europea había puesto a su disposición para afrontar la pesadilla del paro juvenil, que aún se sitúa en una tasa del 37% entre los menores de 30 años (del 49% si sólo tomamos en cuenta a la población de hasta 25 años).

    Si a ello sumamos la indefinición sobre qué es un “empleo de calidad” en el marco de la Garantía Juvenil –como denunció en abril de este año el Tribunal de Cuentas de la UE- o la ausencia de herramientas para el control y el seguimiento por parte de los agentes sociales de las prácticas o de los contratos ofertados, nos topamos además con un escenario en el que –a juicio de Jóvenes CCOO- se incrementa gravemente el riesgo de precarización de las condiciones laborales de la juventud.

    Jóvenes CCOO exige una vez más al Gobierno que se tome en serio el problema del desempleo juvenil, que acabe con la opacidad en la que está instalado, que no desaproveche un programa que –bien utilizado- podría mejorar la situación actual de la juventud y que articule los mecanismos oportunos para asegurar que la Garantía Juvenil no constituya un elemento adicional de precariedad para el que, de hecho, es uno de los colectivos más vulnerables de la sociedad.