Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 29 marzo 2024.

El movimiento sindical argelino alerta y denuncia la dura represión contra sindicalistas

  • Ayer, 5 de febrero, la policía rodeó la oficina de SNATEGS y COSYFOP situada en la Comuna el-Herrache en Argel y procedió a una ola de detenciones y a la retirada abusiva de todas las placas de publicidad de COSYFOP. Asimismo, informó de la prohibición de cualquier tipo de reunión dentro la oficina que ha sido precintada.

Tras un año de movilización popular que ha contado con el acompañamiento del movimiento sindical independiente en Argelia, la mayor parte de los dirigentes sindicales están sujetos a medidas represivas, arrestos, penas de prisión y despidos en una campaña, según denuncian, orquestada “por el régimen en el poder, sea bajo la dirección del destituido Abdelaziz Bouteflika o del actual AbdelMajid Tebboune”

06/02/2020.
Cartel en defensa de los sindicatos independientes en Argelia

Cartel en defensa de los sindicatos independientes en Argelia

En un comunicado emitido por Raouf Mellal, presidente del SNATEG (sindicato afiliado a la UITA) y de la confederación COSYFOP, se denuncia la grave situación que además de la persecución a líderes sindicales incluye el cierre de sedes sindicales o que las oficinas sean sometidas a vigilancia policial las 24 horas.

Mellal, quien se enfrenta también a demandas por difamación presentadas en su contra por el Ministro de Trabajo, en represalia por las reclamaciones contra el gobierno argelino ante la OIT en la Conferencia Internacional del Trabajo de 2019, afirma que los dirigentes sindicales están sufriendo una doble represión: por una parte, por su actividad en los centros de trabajo ante los despidos masivos y, por otra, por su apoyo a la movilización popular con los arrestos, condenas, humillaciones en las comisarías de policía, amenazas de muerte y torturas.

En mayo de 2019, la OIT, tras una misión de alto nivel a Argelia, exigió a las autoridades que tomaran medidas inmediatas para finalizar la persecución y acoso a dirigentes sindicales, para registrar legalmente a las organizaciones sindicales y restituir en sus puestos de trabajo a las personas que habían sido despedidas por su apoyo a las movilizaciones o por sus actividades sindicales. Las advertencias de la OIT cayeron en saco roto.

En el comunicado sindical se recuerdan las terribles presiones que están recibiendo y los nuevos intentos de clonación de sindicatos, como sucediera en la época de Bouteflika. El comunicado recuerda especialmente los casos de Mellal Raouf, Kaddour Chouicha, Abdelkar Kouafi, Hamza Kherroubi, Rym Kadri, Mohammad El Amie Slimani, Merine Ayoub e Ibrahim Daoudji, sometidos a diferentes condenas de prisión, acoso, tortura, amenazas y despidos.

Los sindicalistas argelinos invitan a las autoridades a establecer un verdadero diálogo transparente para salir de la crisis política y social que pueda evitar una peligrosa explosión social en un plazo corto de tiempo.

Invitan a todas las fuerzas sindicales y políticas y a los actores en el interior y el exterior de Argelia, así como a todas las fuerzas democráticas del mundo, a apoyar un verdadero diálogo entre el poder y la sociedad civil para una transición democrática con la observancia de los derechos humanos que evite aislar al pueblo argelino en la escena internacional. Exhortan a la comunidad internacional democrática a seguir apoyando las movilizaciones populares para conseguir una transición democrática pacífica.

En opinión del movimiento sindical independiente de Argelia, las autoridades deben comenzar a preparar un diálogo global que incluya:

  • la liberación de todos los presos políticos sin condiciones ni reservas;
  • la consagración real de las libertades sindicales, el derecho de manifestación pacífica y reunión y de oposición;
  • el cese del acoso a sindicalistas, activistas y jóvenes del Hirak;
  • el cese de las campañas de arrestos contra los jóvenes del Hirak;
  • la depuración de responsabilidades sobre todos los medios de comunicación y personas que han contribuido a campañas de odio y difamación hacia la región de Kabilia;
  • la consagración del derecho de libre circulación;
  • el acceso de los medios de comunicación a todas las ideologías para que la sociedad pueda expresarse libremente;
  • la apertura de las puertas de Argelia al regreso de los opositores en el extranjero eliminando los cargos contra ellos para encontrar una solución a la crisis.