Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 19 abril 2024.

REVISTA TRABAJADORA, N. 69 (FEBRERO 2020)

22 F, Día de la (des)Igualdad Salarial. "Cuidado con la brecha", de Anna María Mellado García

    LA SECRETARIA de Mujeres e Igualdad de CCOO Región de Murcia, Anna María Mellado, escribe sobre el principio de igualdad de retribución entre trabajadoras y trabajadores.

    02/03/2020.
    "Mind the gap" ("Cuidado con la brecha") es una expresión utilizada en el metro de Londres desde 1969 para avisar a quienes viajan de la existencia de un hueco entre el andén y el vagón del gren y ha sido utilizado como lema reivindicativo por numerosos grupos feministas.

    "Mind the gap" ("Cuidado con la brecha") es una expresión utilizada en el metro de Londres desde 1969 para avisar a quienes viajan de la existencia de un hueco entre el andén y el vagón del gren y ha sido utilizado como lema reivindicativo por numerosos grupos feministas.

    EL PRINCIPIO de igualdad de retribución entre trabajadoras y trabajadores para un mismo trabajo fue introducido por primera vez en la Comunidad Europea en 1957 en el Tratado de Roma. Pero más de 60 años después es aún necesario concienciar a la ciudadanía europea sobre la brecha salarial entre hombres y mujeres de cómo afecta a las pensiones, aumentando el riesgo de pobreza de éstas. Por ello el 22 de Febrero, fecha elegida por el Gobierno de España para celebrar el Día de la Igualdad Salarial en España, se procura recordar que la desigualdad salarial entre mujeres y hombres es una grave realidad difícil de transformar.

    En junio de 2019, el Consejo de Empleo, Política Social, Sanidad y Consumidores de la Unión Europea publicó conclusiones y medidas clave para eliminar la brecha salarial. Se constató que, según Eurostat, la retribución horaria bruta media de las mujeres es aún inferior a la de los hombres y que el indicador de la brecha salarial global evidencia que la brecha de género en el conjunto de los 28 países de la Unión Europea está en torno al 40%.

    La brecha salarial se debe a múltiples factores que son comunes a todos los países de la UE. A pesar de que las europeas posean un mayor nivel educativo, se observa una clara segregación por género en la educación, la formación y el empleo. El desigual reparto de cuidados y tareas domésticas es una realidad que perjudica a las mujeres. Las jornadas laborales cada vez más largas, las exigencias de disponibilidades extraordinarias y la falta de flexibilidad horaria, no permiten conciliar la vida personal, laboral y familiar, excluyendo en mayor medida a las mujeres que a los hombres del mercado laboral. El hecho -involuntario- de que ellas trabajen con mayor frecuencia a tiempo parcial, sumado a una extendida precariedad contractual y salarial, perjudican su desarrollo profesional y las cotizaciones para su futura pensión. Según el Instituto Europeo de la Igualdad de Género, en toda la Unión Europea las mujeres tienen cuatro veces más probabilidades que los hombres de trabajar a tiempo parcial o con contratos temporales. El trabajo feminizado sigue infravalorado y persiste el desequilibrio entre géneros en la ocupación de puestos directivos. Según un informe del Instituto Europeo de la Igualdad de Género concluye que ni los sesgos de género ni las discriminaciones salariales por razón de sexo han desaparecido en los países de la UE.

    Desde el Consejo de Europa se insta a los países miembros de la UE a que adopten medidas para eliminar la brecha salarial y facilitar la conciliación de la vida laboral, familiar y privada. Al fomento del reparto equitativo de cuidados y tareas domésticas se recomienda mejorar la oferta de servicios de prestación de cuidados, de calidad y asequibles por parte de los Estados. Y éstos últimos deberán legislar para mejorar los permisos por motivos familiares y reforzar el papel de los organismos públicos responsables de igualdad para que se haga efectiva la perspectiva de género en la elaboración y aplicación de las políticas públicas.

    Se recuerda la importancia de las organizaciones sindicales en la negociación colectiva y se recomienda a las empresas cambiar de cultura organizativa adoptando modelos de trabajo que faciliten la conciliación de la vida laboral y privada y cumplir medidas que garanticen la igualdad como la implementación de planes de igualdad.

    La propia Comisión Europea se suma proponiendo un Plan de Acción para aumentar la transparencia de las retribuciones, asegurar una selección de personal objetiva y neutral, romper los techos de cristal y profesionalizar los cuidados familiares y el trabajo doméstico. Por su parte, el Comité de Mujeres de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), del cual forma parte la Secretaría Confederal de Mujeres e Igualdad de CCOO, presentó en diciembre de 2019 sus contribuciones al plan de acción con importantes medidas para la promoción de la igualdad de género y la eliminación de la brecha salarial en todos los Estados miembros.

    Acabar con la discriminación salarial también requiere un cambio profundo de la estructura social patriarcal. CCOO apuesta por la formación con perspectiva de género como elemento de mejora de la calidad de la acción sindical y de la negociación colectiva. Entre todas y todos lograremos reducir cada día un poco más la brecha salarial.

    Anna María Mellado es secretaria de Mujeres e Igualdad de CCOO Región de Murcia (@CCOORM).

    Revista Trabajadora, n. 69 (febrero de 2020).