Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 28 marzo 2024.

Comunica una reestructuración mundial que afecta al 20% de su capacidad de producción

Nissan anuncia el cierre de las plantas de producción en Catalunya

    Nissan ha anunciado el cierre de las fábricas de Nissan en Barcelona en el marco de un proceso de reestructuración a nivel mundial para hacer frente a la situación financiera de la compañía. La multinacional ya anunció hace meses una restructuración que afectaba a más de 12.000 puestos de trabajo en el mundo, de los cuales se llevaron a término 4.000 despidos, 600 de ellos en España en un expediente de prejubilaciones.

    28/05/2020.
    Nissan anuncia el cierre de las plantas de producción en Catalunya

    Nissan anuncia el cierre de las plantas de producción en Catalunya

    La decisión se enmarca en la estrategia global de la Alianza Nissan-Renault-Mitsubishi en la que se ha producido un reparto de la gestión de las diferentes áreas geográficas de negocio en el mundo, quedando el continente europeo bajo la dirección de Renault.
    Desde CCOO planteamos nuestra oposición a las decisiones de Nissan con respecto a la capacidad productiva en Europa, afectando a las plantas catalanas y cuestionamos que la decisión de reducir el aparato productivo en la Unión Europea sea acertada para la estrategia de la Alianza. Al contrario, en el sector de grandes constructores de la automoción, la hegemonía financiera y comercial como empresa líder, nada más se entiende con las sinergias de todos los socios de la Alianza. Para ser líder mundial, se ha de ser un operador global y liderar comercialmente en todos los segmentos de producción y en todas las zonas del mundo. En Europa hay una apuesta firme con el New Green Deal, con una inyección de cien mil millones de euros directos y con una aportación privada de 250.000 millones más. Una parte importantísima se destinará a la movilidad sostenible. Nissan, y la Alianza, no pueden renunciar a este proyecto hacia el vehículo eléctrico, la conducción inteligente y la movilidad compartida.

    Si la Alianza global de los tres socios quiere seguir liderando el sector de la automoción en el mundo, ha de ser líder en el desarrollo de las nuevas tecnologías aplicadas en los vehículos, sus procesos de producción y la futura estrategia de movilidad, sobre todo en las grandes áreas metropolitanas. Es un grave error abandonar una de las capitales del mundo como es Barcelona, hub tecnológico del sur de Europa.

    Las fábricas de Nissan en España tienen un nivel de rentabilidad de los más altos del grupo, además de una alta flexibilidad para desarrollar diferentes proyectos en producción, como se ha demostrado con la fabricación de hasta cinco modelos diferentes, hasta ahora.

    Las inversiones para llenar de producción las fábricas españolas con un nuevo modelo eléctrico tal y como se ha trabajado en los últimos meses, no es muy alta, adaptando la planta de pintura tal y como estaba comprometido en los acuerdos a los que se llegaron con la reducción de 600 compañeros y compañeras hace unos meses. No se pueden incumplir los acuerdos y engañar a los trabajadores y trabajadoras, así como a las instituciones que tenían comprometidas las ayudas para realizar la inversión acordada.

    El cierre de las operaciones industriales en España supone unos riesgos financieros muy elevados para la multinacional, además de un impacto muy grave para el empleo en Catalunya, que es lo más importante.

    Los costes del cierre llevan unos riesgos en indemnizaciones a trabajadores/as, indemnizaciones de contratos comerciales, indemnizaciones a proveedores, costes judiciales mercantiles y costes judiciales laborales. Gasto en infraestructuras y suelo industrial para descontaminarlo. Una cantidad ingente de dinero que muestra la equivocada decisión de la multinacional. Calculamos que asciende a más de mil millones de euros.

    Además del impacto en la imagen que quedará en Europa el tan valorado honor japonés en la gestión de los negocios y la crueldad de responder a una sociedad que ha hecho una apuesta por ellos hace más de 40 años, con un cierre cuando pasan la peor crisis de la historia en los últimos 80 años. Es imperdonable y atenta contra los valores de la sociedad japonesa.

    Los trabajadores y las trabajadoras de Nissan, y CCOO a su lado, no descansaremos hasta convencer a la multinacional de mantener las operaciones industriales en España. Emplazamos a las instituciones españolas, catalanas y municipales a que trabajen a nuestro lado hasta tener una solución.

    La Alianza con Renault en Europa ha de ser una oportunidad, no un problema para las fábricas de Nissan y Renault en España, manteniendo actividad en todas las plantas, desarrollando los proyectos de futuro, aprovechando las sinergias y reforzando el compromiso social de las multinacionales con el entorno en el que operan, primero con los trabajadores y trabajadoras, manteniendo el empleo de más de 20.000 familias que dependen de la continuidad de la empresa.