Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 28 marzo 2024.

REVISTA "TRABAJADORA", N. 72 (MARZO DE 2021)

Empleo/ A vueltas con la conciliación y la corresponsabilidad, Cloti Iborra Alcaráz

    Echar mano de las vacaciones, peticiones de excedencias y reducciones completas de jornada (con lo que suponen de pérdida de poder adquisitivo) es lo que sigue primando cuando cuidar y trabajar es incompatible. Sobre todo en el caso de las trabajadoras. ¿Qué significa la conciliación en la vida de las mujeres? ¿Dónde está la corresponsabilidad, tanto gubernamental como de un porcentaje aún elevado de padres, a quienes su paternidad no afecta en su futuro profesional?, Cloti Ibarra reflexiona sobre ello.

    08/04/2021.
    Informe brecha de ingresos (salario y pensiones) en el País Valencià.

    Informe brecha de ingresos (salario y pensiones) en el País Valencià.

    LA ACTUAL crisis sanitaria y económica provocada por la covid está agudizando los problemas estructurales de nuestro mercado laboral, que sufren millones de personas en desempleo o en condiciones precarias y salarios indignos. Las mujeres lideran, tristemente, esa situación de precariedad, tal y como se pone de manifiesto en el análisis de los datos que recogen los informes que CCOO edita cada año en relación a su situación sociolaboral y la brecha salarial.

    En estos informes también se pone de manifiesto las dificultades para conciliar la vida laboral y familiar, pero sobre todo se evidencia quién se hace cargo de los cuidados, cómo y qué consecuencias tiene este desigual reparto de tareas entre hombres y mujeres.

    Uno de los factores que influye más en la generación de la brecha salarial es la jornada laboral, ya que si hombres y mujeres tuvieran la misma distribución entre trabajo a tiempo completo y parcial, ésta se reduciría a la mitad. El 74,4% de los contratos a tiempo parcial son ocupados por ellas y, si bien es cierto que la mayoría lo hace involuntariamente al no encontrar un trabajo a tiempo completo, no lo es menos que una gran cantidad lo hace por imposibilidad de compatibilizar trabajo y cuidados, haciendo uso de las reducciones de jornada. Esto supondrá menores retribuciones salariales y, también, mayor brecha en las pensiones.

    Según datos del País Valencià, que no difieren mucho de los del resto de Comunidades Autónomas, las excedencias por cuidado de menores fueron instadas por mujeres en un 92,3 % y por cuidado de familiares el 81,7 %. Estos datos disponibles son de antes de la pandemia, de 2019, que se han recrudecido con el desmoronamiento del frágil modelo de cuidados. Con la covid se ha evidenciado que nuestra sociedad no los tiene asumidos: ni el Estado, ni las empresas, ni las familias son corresponsables, lo que perpetúa los roles de género.

    Como ha subrayado recientemente el secretario general de CCOO, Unai Sordo: “Las mujeres ganan menos porque cuidan más a las personas, y cuidan más porque no hay suficientes servicios sociales ni servicios públicos de calidad”.

    Una encuesta realizada recientemente por Yo No Renuncio. Asociación por la conciliación, sobre cómo afrontaban las madres trabajadoras las cuarentenas de sus hijos e hijas, señala que el 22% ha renunciado durante este año de pandemia a todo o parte de su trabajo por cuidado de menores. En estos casos, las soluciones más utilizadas fueron echar mano de días de vacaciones (74%), coger excedencias (21%) o reducciones completas de jornada (11%), éstas dos últimas sin sueldo.

    Los resultados de este estudio certifican la percepción que tiene CCOO en cuanto a quién está “pagando” esta crisis y quién está asumiendo los cuidados, a costa de su trayectoria profesional y de su salud.

    Se hace necesario, por tanto, que se tomen medidas para combatir los persistentes estereotipos y roles de género que condicionan la vida de las mujeres. Además, urgen políticas de corresponsabilidad que transiten hacia un nuevo modelo social, cultural y económico que contemple los cuidados y se corresponsabilice de ellos, pues es tarea de toda la sociedad garantizar una vida plena para toda su ciudadanía.

    En ese camino hacia un modelo más justo, igualitario, sostenible y “vivible”, CCOO exigirá políticas públicas que impulsen una nueva cultura del tiempo; la aprobación de una ley de usos del tiempo que aborde cuestiones como la conciliación, la corresponsabilidad y la racionalización de horarios desde una perspectiva de género; el fortalecimiento de los servicios públicos de calidad, especialmente en educación y servicios sociales; y la extensión de una oferta de infraestructuras y servicios relacionados con los cuidados.

    Cloti Iborra (@ciborra_clot) es secretaria de la Dona, Polítiques LGTBI (@AccioLGTBI) e Institucional de CCOO del País Valencià (@ccoopv).

    Revista Trabajadora, n. 72 (marzo de 2022).