Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 19 abril 2024.

CCOO se une a la lucha en defensa de los derechos de los pueblos indígenas de Brasil

    CCOO se une a la defensa de los derechos de los pueblos indígenas de Brasil como respuesta a la llamada de solidaridad contra el proyecto genocida contra los pueblos indígenas y la deforestación del Amazonas que pretende llevar a cabo el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro.

    19/08/2021.
    Pueblos indígenas Brasil

    Pueblos indígenas Brasil

    El objetivo de unirse a su ‘Luta pela vida’ (lucha por la vida) es el de internacionalizar la lucha para unir esfuerzos en defensa de los derechos de los pueblos indígenas brasileños. La secretaria confederal de Internacional y Cooperación, Cristina Faciaben, que forma parte de esta delegación, ha estado trabajando en su organización junto al resto de representantes políticos, medioambientales y organizadores indígenas que la componen, aunque las restricciones de movilidad impuestas le han impedido viajar hasta Brasil.

    El próximo 23 de agosto, los pueblos indígenas y las fuerzas progresistas brasileñas se movilizarán en el campamento ‘Luta pela vida’ en Brasilia contra las políticas de asalto a la Amazonía y a sus pueblos.

    CCOO denuncia que Bolsonaro haya dicho que “donde hay tierra indígena, hay riqueza debajo” y que “cualquier reserva indígena que pueda reducir en tamaño, lo hará”. En 2019, las invasiones de territorios indígenas se dispararon un 135%, mientras que la deforestación de la Amazonia aumentó un 85%.

    La comunidad científica ha alertado de que la Amazonía está llegando a un punto de inflexión irreversible y que entrará en un ciclo de degradación, porque no generará suficientes precipitaciones para mantenerse con vida y sí lanzará miles de millones de toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera.

    Las políticas neoliberales de Bolsonaro también atacan directamente a la clase trabajadora con un proyecto de reforma laboral que pretende eliminar diez derechos garantizados legalmente, entre ellos las vacaciones, la jornada laboral de ocho horas o el salario mínimo interprofesional (SMI).

    Ayer, la Central Única dos Trabalhadores (CUT) junto a otros sindicatos y movimientos sociales brasileños convocaron una huelga general de empleados públicos contra de la reforma administrativa que quiere aprobar Bolsonaro.

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