Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 19 abril 2024.

SOLIDARIDAD CON LAS FAMILIAS DE LAS PERSONAS FALLECIDAS EN CALAHORRA

El repunte de la siniestralidad mortal exige de un compromiso efectivo del Gobierno

    27/05/2022.
    CCOO expresa su solidaridad a familiares de los trabajadores fallecidos ayer en Calahorra.

    CCOO expresa su solidaridad a familiares de los trabajadores fallecidos ayer en Calahorra.

    El accidente que costó la vida ayer a dos trabajadores por una explosión en una planta de biodiesel de Calahorra, se une al menos a otras cinco muertes en lo que llevamos de semana y a un incremento de los accidentes mortales del 27% en el primer trimestre de 2022.

    Desde CCOO queremos mostrar nuestro apoyo y solidaridad a las familias y personas allegadas a los dos trabajadores fallecidos ayer jueves en una explosión en la planta de biodiesel de la empresa Iniciativas Bioenergética en Calahorra (La Rioja). Asimismo reclamamos a la Inspección de Trabajo y a la autoridad laboral de La Rioja, la realización de una investigación exhaustiva del suceso que permita conocer la totalidad de sus causas para así mejorar la prevención y determinar las posibles responsabilidades que se pudieran derivar del accidente.

    Estas dos muertes se unen a las cinco acaecidas desde el pasado lunes: una caída en altura durante la instalación de una aire acondicionado en El Ejido (Almería), un atropello por un tractor en Villanueva de Alcardete (Toledo), un aplastamiento en una planta de reciclaje de Trasmulas (Granada), un aplastamiento por un toro mecánico en Cocentaina (Alicante) y un fallecimiento derivado de las quemaduras en el 80% del cuerpo de trabajador accidentado en la planta de Acerinox de los Barrios (Cádiz) hace nueve meses. Todas estas muertes están producidas por causas fácilmente prevenibles. Además, el último avance de estadísticas de accidentes de trabajo, correspondiente al primer trimestre de 2022, muestra un crecimiento del 27% de los accidentes mortales respecto al mismo periodo del año pasado.

    “El repunte de las muertes en el trabajo que está sufriendo España es absolutamente insoportable”, ha afirmado Mariano Sanz Lubeiro, secretario confederal de Salud Laboral y Sostenibilidad Medioambiental de CCOO. “El año pasado murieron trabajando 705 personas. Y es una cifra provisional que aumentará significativamente cuando tengamos las estadísticas definitivas. Una cifra tan elevada de muertes sería un auténtico escándalo si tuviera otro origen, pero parece que cuando los únicos motivos son ir a ganarse el pan y la falta de medidas preventivas, se asume como un tributo a pagar inevitable. CCOO no nos vamos a resignar y vamos a seguir exigiendo una prevención de riesgos real en las empresas, que no se limite a la tramitación burocrática de unos documentos como viene sucediendo demasiado a menudo. Y también le vamos a exigir al Gobierno central y a los autonómicos que no se resignen. Deben ampliar los recursos humanos y materiales de la Inspección de Trabajo y aumentar la extensión de sus campañas de vigilancia. Se deben también mejorar los recursos del Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo y de los organismos técnicos de las CCAA. Hay que mejorar los mecanismos de control de calidad de los Servicios de Prevención y aprobar de manera inmediata la Estrategia Española de Seguridad y Salud en el Trabajo”.

    Pero también, ha señalado Mariano Sanz, “hay que cambiar muchas cosas en el ámbito de la justicia. El miércoles conocimos el indulto del Gobierno a una empresaria condenada a tres años de prisión por un accidente que le costó la vida a un trabajador y graves quemaduras a otros dos en la fábrica de Ron Montero de Motril (Granada) con una sentencia firme que señalaba de manera literal el 'más absoluto incumplimiento´ en materia de seguridad. Y esta misma semana también conocíamos el retraso de siete años, siete meses y cinco días para celebrar el juicio por una muerte por golpe de calor en Sevilla y el de 10 años para el juicio por el accidente en el que murieron seis mineros en el Pozo Emilio de Pola de Gordón (León). Todo pareciera indicar que hubiese una justicia para ricos y otra para pobres. Y que a la clase trabajadora nos hubiera vuelto a tocar perder”.