Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 25 abril 2024.

La delegación trabajadora de España interviene en la plenaria de la Conferencia Internacional del Trabajo

    Como es tradición en el curso de la Conferencia Internacional del Trabajo, las delegaciones nacionales hacen uso de la palabra en las sesiones plenarias dedicadas a la discusión de la memoria del Director General y el informe de la Presidenta del Consejo de Administración.

    07/06/2022.
    Sala de la plenaria en el Palacio de Naciones (ONU, Ginebra)

    Sala de la plenaria en el Palacio de Naciones (ONU, Ginebra)

    La intervención comenzó rechazando la guerra contra Ucrania y expresando la solidaridad de los trabajadores y trabajadoras con todas las víctimas de este atroz ataque a la paz pero recordando también a las víctimas de otros conflictos bélicos en el mundo y a aquella guerra silenciosa “que asesina a diario a sindicalistas y líderes sociales en todo el mundo”.

    En el discurso se añadió que “ninguna guerra es justificable. El diálogo, el fortalecimiento de la democracia, la garantía de los derechos humanos y, como nos recuerda la OIT, la promoción de la justicia social, son los únicos medios para conseguir una paz efectiva y duradera que beneficie a toda la sociedad porque sin justicia social se pone en riesgo la paz pero también la esencia misma de la democracia”.

    Por otra parte y en la introducción del discurso, la delegación de los trabajadores y trabajadoras de España exigió en este importante foro internacional el reconocimiento del Estado de Palestina como paso fundamental para mejorar la situación de los trabajadores y trabajadoras en los territorios árabes ocupados. La situación es ya límite como ha indicado el Director General de la OIT, Guy Ryder, en el informe dedicado en 2022 a los territorios árabes ocupados. Tanto CCOO como UGT, acreditados en esta delegación, son miembros de la campaña internacional por el reconocimiento del Estado de Palestina.

    En el ámbito nacional, el discurso recordó que “en España, al igual que el resto del mundo, vivimos una situación repleta de incertidumbre ante los riesgos que supone encadenar una crisis tras otra. En este contexto, los mandantes de la OIT en nuestro país afrontamos la situación apostando por el diálogo social entre las organizaciones sindicales y empresariales más representativas y el gobierno configurando políticas públicas que ponen en el centro a las personas, el mantenimiento y la protección del trabajo y la lucha contra la pobreza y la desigualdad. Y si hace cinco años denunciábamos desde esta tribuna al gobierno conservador que rechazaba el diálogo social es hoy justo felicitarnos por un gobierno de izquierdas que entiende que el diálogo social ayuda a aminorar el impacto de las crisis y permite una recuperación más rápida”.

    Se señaló también que “en los dos últimos años en España hemos logrado seis acuerdos sociales por la defensa de los puestos de trabajo y del sistema público de pensiones, avanzado en igualdad, dignificando el SMI y logrado una importantísima reforma laboral que ha mejorado los derechos de las personas trabajadoras, devolviendo a la negociación colectiva su papel transcendental en las relaciones laborales y parte del equilibrio y coherencia que las políticas liberales le quitaron en el pasado”.

    Una reforma laboral que, en consideración de la delegación española acreditada ante la CIT, está mostrando su valor y utilidad consiguiendo que se creen más puestos de trabajo, aumentando la contratación indefinida a máximos históricos y reduciendo la contratación temporal.

    Frente a todos estos desafíos, la delegación trabajadora de España añadió que “debe asegurarse mayor estabilidad en el empleo, mejores condiciones de trabajo, mejorar el aprendizaje de las plantillas y lograr empresas más productivas. Hay que garantizar la protección social de todas las personas trabajadoras y velar por la salud y la seguridad en el lugar de trabajo, una lacra que en nuestro país asesina, todos los años, a 800 personas. Tenemos que fortalecer la igualdad de género y promover mayores dosis de justicia social, impulsando una forma de multilateralismo más interconectado e inclusivo y consiguiendo que el bilateralismo ciego deje de tratar como igual democracia y dictaduras. ¡Basta ya de acuerdos comerciales con países que no respetan los Derechos Humanos!”.

    Para esto, señaló la delegación de trabajadoras y trabajadores de España, se necesita una OIT más fuerte, con más recursos y más resolutiva y dio la bienvenida deseándole éxitos en su gestión al nuevo director general electo, Gilbert Houngbo, mostrándole el apoyo del grupo trabajador de España, uno de los países del mundo con más convenios ratificados de la OIT y agradeciendo al director general saliente, Guy Ryder, su labor y apoyo durante todos los años de su mandato.