La Secretaría Confederal de Transiciones Estratégicas y Desarrollo Territorial, en coordinación con las organizaciones territoriales y federaciones, ha participado en el proceso de consulta previa del anteproyecto de la Ley de Industria, abierto por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo con más de 70 propuestas de mejora.
La Ley de Industria de España es una ley que data de 1992 y ha sido afectada por diferentes cambios políticos y normativos desde entonces, como la transformación de la Comunidad Económica Europea en la Unión Europea y la aparición de nuevas áreas de actuación pública en la industria, como la transición energética, la lucha contra el cambio climático y la economía circular. También se han dado importantes cambios en la industria, como el avance tecnológico y la digitalización, y la pandemia de COVID-19 ha puesto de manifiesto la necesidad de fortalecer la base industrial en España y en Europa.
La Ley de Industria debe responder a esta nueva estrategia y tener en cuenta las necesidades del sector industrial español, estableciendo un marco adecuado para estimular la modernización de la industria, fomentar la creación de empleos de calidad y promover la eficiencia energética y la innovación. Además, la ley debe abordar al menos los siguientes aspectos: política y promoción industrial, reindustrialización, neutralidad climática y economía circular, transformación digital, seguridad y calidad industriales y gobernanza. Para CCOO, el uso de fondos europeos de recuperación es una herramienta clave para impulsar la recuperación de la industria mientras se avanza hacia un modelo productivo más sostenible. La Ley se encuentra enmarcada dentro del Componente 12 del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, identificado como hito 176, correspondiente a la reforma C12.R1 “Estrategia Española de Impulso Industrial 2030”.
Además, la Ley debería estar fortalecida por un gran pacto de estado por la industria, reivindicado por CCOO en varias asambleas y una gran manifestación el pasado 21 de junio, que le permita sobrevivir independientemente del color político que gobierne, además debe apoyar la transición hacia una economía circular, fomentando cambios en los hábitos y un comportamiento responsable de los consumidores.
Ahora bien, los resultados que conllevaran estas transformaciones deben distribuirse y quedar identificados en el Anteproyecto de Ley con medidas para impulsar una transición justa e inclusiva, en términos sociales y laborales.
Por todo ello el propósito de CCOO es que el resultado final del anteproyecto de ley de industria contenga las aportaciones y sugerencias enviadas al Ministerio con el ánimo de crear una comunicación fluida para poder exponer lo que consideramos son unas medidas adecuadas para un futuro óptimo de la industria.