Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 28 marzo 2024.

Digitalización, riesgos psicosociales y salud mental en la empresa: es necesario cambiar las prácticas de gestión laboral

    La secretaría confederal de Salud Laboral y Sostenibilidad Medioambiental con el apoyo técnico de la Fundación 1º de Mayo, organizamos el seminario “Organización del trabajo y salud laboral. Riesgos psicosociales”, enfocado en la digitalización, dentro del proyecto de la Confederación Europea de Sindicatos “Sindicatos para una recuperación justa. Reforzar el papel de los sindicatos para mitigar el impacto de la crisis COVID-19”.

    17/02/2023.
    Seminario organización del trabajo y salud laboral 1

    Seminario organización del trabajo y salud laboral 1

    Este seminario tuvo diversos objetivos. Por una parte, un objetivo transversal, que es apoyar el enfoque preventivo en el discurso y la práctica sindical en relación con la salud mental en los lugares de trabajo. Ello pasa por la prevención de los riesgos psicosociales, evaluando y cambiando las prácticas empresariales de gestión laboral, frente a apostar por las soluciones individuales e individualizadoras como la resiliencia, los cursos de afrontamiento o la medicalización, tan presentes en la actualidad informativa. Por otra parte, conocer cómo se transforman las prácticas empresariales de gestión laboral con la digitalización (TIC, gestión algorítmica y gestión platafórmica) y sus efectos en términos de exposición a riesgos psicosociales y de precarización de condiciones de trabajo. Finalmente, compartir la respuesta que puede darse desde la negociación colectiva a los procesos de digitalización para evitar exposiciones nocivas para la salud y explorar el reconocimiento de la salud mental como enfermedad profesional desde nuestro marco jurídico.

    Con el objetivo de dar respuesta a estos retos tomamos una perspectiva interdisciplinar y explotamos la complementariedad de conocimientos, los derivados del ámbito científico-técnico y los de la experiencia sindical. Resumimos aquí los contenidos y recomendaciones.

    El seminario fue inaugurado por Pedro Linares Rodríguez, director de Estudios de la Fundación 1º de Mayo y clausurado por Mariano Sanz Lubeiro, Secretario de Salud Laboral y Sostenibilidad Medioambiental de CCOO. Así mismo fue moderado por el equipo de la Secretaría de Salud Laboral y Sostenibilidad Medioambiental de CCOO: Oscar Bayona Plaza, Jaime González Gómez y Carmen Mancheño Potenciano.

    Por la mañana, contamos con las intervenciones de Clara Llorens Serrano, socióloga de la F1M-ISTAS, que se centró en la relación entre los riesgos psicosociales y la salud mental y planteó el cambio de las prácticas de gestión laboral para reducir estos riesgos como primer paso para promover la salud mental en los lugares de trabajo, en base a la basta evidencia científica que asocia la exposición nociva a estos riesgos con los trastornos de salud mental. Seguidamente, Pierre Bérastégui investigador del ETUI, reportó y ejemplificó la relación entre las características que toma habitualmente la gestión platafórmica y la exposición nociva para la salud a los riesgos psicosociales relativos a la falta de apoyo de superiores y compañeros, a la falta de influencia, al conflicto trabajo-vida y a la inseguridad, en base a los resultados de una revisión bibliográfica. Oscar Pérez Zapata, profesor de ICAI-ICADE y UC3M, focalizó su participación en mostrar la asociación insalubre entre la digitalización, la intensificación del trabajo y los problemas de salud mental, con micro-datos de la EWCS. También destacó la experiencia danesa de regulación de la intensificación del trabajo a nivel estatal, para emularla y propuso exigir a las empresas transparencia en relación con las bajas por problemas de salud mental de sus plantillas, igual que se les exige publicitar información sobre beneficios. Arturo Lahera Sánchez, profesor de la UCM, subrayó que la gestión algorítmica se basa en la informatización de decisiones tomadas por las gerencias y las ingenierías en relación con la organización, asignación, vigilancia de la eficacia y calidad del trabajo, según los intereses empresariales, para el disciplinamiento de trabajadores y trabajadoras; es decir, que el algoritmo no actúa por su cuenta. En consecuencia, consideró de la máxima importancia exigir la participación sindical en su diseño para introducir elementos que mejoren las condiciones de trabajo, también las relativas a la salud laboral (descansos, cargas, autonomía, etc.) y testearlo. Cristóbal Molina Navarrete, catedrático de derecho del trabajo de la Universidad de Jaén, resaltó tres orígenes de la falta de reconocimiento de los trastornos mentales como enfermedades profesionales en España: no están en el listado; la exigencia de causa exclusiva, para que pueda considerarse enfermedad derivada del trabajo y la interpretación restrictiva de la jurisprudencia. En ese marco planteó apelar al listado de enfermedades profesionales de la OIT de 2010, que aunque no es vinculante sí reconoce los trastornos mentales, al reconocimientos del burn out por parte de la OMS como trastorno mental de origen ocupacional y a la jurisprudencia; ello para exigir tres reformas: la del decreto de enfermedades profesionales de 2006; y la del artículo 156 en dos sentidos: para eliminar la exclusividad substituyéndola por causa preponderante o desencadenante; y la presunción de laboralidad en el caso de suicidio.

    Por la tarde, contamos con la presencia de Irene Galí Magallón, de la Fundació Cipriano García que a partir de un estudio de casos sobre la gestión platafórmica en las tareas feminizadas de la limpieza, recalcó que lleva a una mayor precarización e invisibilización de estos trabajos. Así empeora una ya baja remuneración, aumenta el ya existente empleo informal, la huida del derecho del trabajo y la vulnerabilidad de las trabajadoras; y suma la exigencia de disponibilidad permanente, la vigilancia y el disciplinamiento a partir de las sanciones, evaluaciones y el algoritmo y reduce la autonomía de las trabajadoras.

    En la mesa de negociadoras contamos con las intervenciones de Ramona Pineros López (Acción sindical y Negociación Colectiva. Sector Telecomunicaciones FSC-CCOO), Lucía Román de Leyva (Responsable sector TIC. Federación de Industria-CCOO) y Lucho Prieto Orallo (Secretario de Negociación Colectiva. Federación de Servicios-CCOO). Se centraron en sus experiencias respecto al derecho a la desconexión, al registro de jornada y a la gestión platafórmica, concluyendo sobre la importancia de la concreción de los derechos a través de la negociación colectiva, cambiando las prácticas de gestión laboral para evitar la exposición a los riesgos psicosociales. Tenemos retos, pero también un camino ya recorrido. Por ejemplo, en el registro horario se subrayó la importancia de negociar los criterios, qué se incluye y qué no, la herramienta, su diseño y programación y siempre establecer un periodo de testeo y cambios; el objetivo no es controlar sino evitar el alargamiento de jornada. En cuanto a la desconexión digital, se insistió en el detallar al máximo posible lo que es “no responder comunicaciones por ninguna vía”, por ejemplo, especificando las vías (wasap, correo….) o lo que se entiende como periodo de desconexión (vacaciones, descanso diario, asuntos propios, etc) y el poner la pelota del cumplimiento en el campo de la alta dirección, como responsable de que sus estructuras de mando la cumplan y hagan cumplir a todos los niveles. En cuanto al trabajo de plataforma, se recalcó la necesidad de establecer los parámetros para el diseño o rediseño del algoritmo, qué valora y qué no, cómo se usa (optimizar el tiempo para que trabajador pueda descansar o para explotarlo) y las condiciones de trabajo aparejadas (marcar descansos, salarios fijos vs por objetivos, etc).

    Se programaron 4 espacios de participación a lo largo del seminario, en los que intervinieron una parte importante de las 56 personas inscritas, pertenecientes a las estructuras sindicales de negociación colectiva y salud laboral de CCOO, a nivel sectorial (Servicios a la Ciudadanía, Industria, Servicios, Mar, Enseñanza, Habitat, Sanidad y Socio-sanitarios) y territorial (Euskadi, Cantabria, Madrid, Castilla-La Mancha, Castilla y León, La Rioja, Andalucía, Extremadura, Ceuta, Galicia y Canarias), en la línea de cambiar las prácticas de gestión laboral a través de la negociación colectiva para transformar las condiciones de trabajo y evitar la exposición a los riesgos psicosociales y con ello reducir los problemas de salud mental derivados del ámbito laboral.