Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 27 abril 2024.

REVISTA "TRABAJADORA"

Ciberfeministas / La historia como debe ser contada. Mujeres en la sombra, de Iria Antuña Domínguez

    Es difícil creer que el papel de las mujeres en la historia, en las ciencias, en la filosofía, en las artes y en todas las disciplinas y manifestaciones culturales ha sido residual. Primero, por una simple cuestión de proporciones: la mitad del mundo no puede haber sido un mero adorno en todo el desarrollo de la humanidad.

    12/04/2022.
    Portad de la web Mujeres en la sombra

    Portad de la web Mujeres en la sombra

    En segundo lugar, porque, incluso si se mira el universo desde una perspectiva centrada en el hombre –no como ser humano, sino como el supuesto género dominante– resulta imposible justificar que absolutamente todos los logros, avances, corrientes de pensamiento y que el quehacer de la vida cotidiana hayan estado marcados únicamente por el devenir de sus caprichos y decisiones, sin que las mujeres hayan tenido ningún rol principal.

    Podría enumerar muchas otras razones absurdas para sostener el silencio y el olvido al que tantas mujeres han sido sometidas a lo largo de los siglos, pero creo que ha quedado claro: no tiene sentido mantener ese principio y ha sido, a todas luces, un abuso, una premeditada omisión. 

    No podemos permitir que la información que nos llegue sea sesgada, interesada y manipulada. No es que no se les (re)conozca, sino que directamente han sido borradas de los libros y de la tradición cultural, convirtiéndolas en meras anécdotas, en adornos o, directamente, las han condenado al mayor ostracismo posible: el del olvido. Incluso, muchas mujeres han vivido a la sombra del éxito de otros hombres, cuando realmente los avances, las ideas, los pensamientos o descubrimientos nacieron gracias a su talento, lucidez e inteligencia.

    De ahí la importancia de crear los espacios e iniciativas que permitan recuperar, reconocer y celebrar su legado, sacar de las sombras todas sus aportaciones y llevarlas a la luz de las actuales y próximas generaciones, de manera que se conviertan en espejo y referente de tantas mujeres, niñas y jóvenes –también de hombres y niños– que han crecido sin ellas. Espacios digitales como la web Mujeres en la sombra, cuyos contenidos están capitaneados por Carmen Matas, se convierten en una magnífica iniciativa.

    Porque la historia, hasta hoy, nos la han contado prácticamente en su totalidad con una visión totalitaria desde los ojos de los hombres, pero nunca desde la perspectiva de las mujeres. Y esto ocurre pese a que podemos intuir su importante papel, a que hemos conocido sus luchas a contracorriente, a las (todavía) pocas que han obtenido el merecido reconocimiento y a la certeza absoluta de que el mundo que vivimos hoy ha sido construido también gracias a ellas y sus valiosas aportaciones, pese a los persistentes intentos por silenciarlas e invisibilizarlas.

    Para construir el futuro necesitamos una sociedad formada e informada, al tanto de todas las aportaciones de mujeres y hombres a lo largo de la historia, que sirva como referencia y testifique, con mayor apego a la realidad, el desarrollo de la humanidad. Pero no como un simple homenaje, sino reconociendo su protagonismo y la importancia de su legado.