Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 12 mayo 2024.

REVISTA TRABAJADORA ONLINE

Por Aquí/ Por un contrato social feminista, de Ángeles Balué Martín

    Pequeña crónica de Ángeles Balué sobre la jornada La democracia asediada.

    28/02/2024.
    Fotografía de Carlos Muñoz, manifestación del 1º de Mayo de 2022.

    Fotografía de Carlos Muñoz, manifestación del 1º de Mayo de 2022.

    LA JORNADA La democracia asediada, organizada hace unos meses por la Escuela Sindical Pedro Patiño, reivindicó la necesidad de un contrato social feminista y sostenible medioambientalmente. Participaron en la misma Adoración Guamán (catedrática de Derecho del Trabajo en la Universidad de Valencia), Cristina Monge (socióloga y experta en movimientos sociales) y Javier Lorente (doctor en Ciencia Política).

    En el debate se planteó la necesidad de una perspectiva jurídica feminista en el derecho laboral. El ordenamiento jurídico actual no es neutro, ya que no reconoce los trabajos de cuidados que históricamente han desempeñado las mujeres de manera gratuita, y que tantas repercusiones han tenido tanto en la posibilidad de incorporación al mercado laboral de las mujeres como a las posibilidades laborales de los hombres.

    El sindicalismo de clase de CCOO con perspectiva feminista debe ayudar a romper el modelo. La legislación desarrollada a partir del 2019 en materia de corresponsabilidad es un punto de inflexión y la labor que realiza CCOO, de concienciación y negociación en los planes de igualdad o convenios colectivos, es determinante.

    El modelo de cuidados debe ser un asunto colectivo, político y social, siendo el Estado quien debe ofrecer cobertura y garantías de accesibilidad y universalidad, en derechos y en servicios públicos.

    Por otro lado, los cuidados, son la casa común de la lucha feminista y ambiental: tanto el cuidado de las personas cómo el medio donde viven.

    En 2015 nace la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, aprobada por la 70ª Asamblea General de la ONU, y debe ser el centro del necesario contrato social. Plantea un plan de acción a favor de las personas, el planeta y la prosperidad, para así fortalecer la paz universal y el acceso a la justicia social.

    No es extraño, por tanto, que la extrema derecha rechace el contrato social y confronte con la Agenda 2030, el feminismo y el sindicalismo de clase, los principales precursores de un contrato social feminista y medioambientalmente sostenible.

    Ángeles Balué es secretaria general de la Federación de Servicios de CCOO de Madrid.

    Revista Trabajadora, n. 81 (febrero de 2024).