Elena Blasco y Unai Sordo en la rueda de prensa
Con la campaña Lo mires como lo mires es cosa de todas y todos. #NoSeasCómplice”, CCOO quiere poner el foco de interés en las personas, en las mujeres, en las víctimas tanto directas como indirectas, con el objetivo de sensibilizar en la corresponsabilización compartida de todas y todos contra “la expresión más dramática y cruel” de las desigualdades y de la “injusta situación de inferioridad que padecen las mujeres”, que responden a un constante intento de mantener la injusta posición de inferioridad de la mujer, según explicó Elena Blasco.
“Detrás de las cifras de asesinatos hay mujeres”
En opinión de la secretaria de Mujeres e Igualdad de CCOO, “los asesinatos son la punta del iceberg de las violencias machistas”. Asesinatos que ascienden a 51 mujeres en lo que va de año, 1.027 desde 2003 y 43 menores, unas cifras que más allá de las estadísticas, necesarias para conocer la dimensión de estas violencias, “ponen de manifiesto que con cada víctima se resquebraja nuestro Estado social y de derecho”.
“Las violencias machistas alcanzan a las mujeres, pero es responsabilidad de todas y todos acabar con ellas”, subrayó la secretaria de Mujeres e Igualdad, de ahí que el eslogan de la campaña afirme que la eliminación de la violencia contra las mujeres “Lo mires como lo mires es cosa de todas y todos”.
Tanto la secretaria de Mujeres e Igualdad como el secretario general de CCOO hicieron un llamamiento a la participación en las movilizaciones que se van a celebrar en torno al 25 de noviembre. “CCOO quiere hacer un llamamiento a mujeres y a hombres a participar en las movilizaciones”, porque "especialmente este año es importante que las calles se tiñan de morado denunciando las violencias machistas”, dijo Unai Sordo, “frente al negacionismo de la violencia machista por parte de movimientos reaccionarios”.
“Instamos a no normalizar lo que no es normal”
Asimismo, el secretario general de CCOO alertó de la “deriva ridícula, pero preocupante, que busca normalizar lo que no es normal, despolitizar la violencia contra las mujeres, situarla en el ámbito de lo personal”. Por el contrario, “las diversas desigualdades, cuya expresión más dramática es la violencia contra las mujeres, es una cuestión de índole pública y política, que tiene causas estructurales”, aseveró antes de concluir en la necesidad de levantar un cordón sanitario, para que no suceda como con el blanqueo de la extrema derecha de Vox, en defensa de los derechos de las mujeres. “Hay que llamar a las cosas por su nombre: la violencia contra las mujeres es una violencia de género, machista”, finalizó.
