Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 20 abril 2024.

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Trabajadoras en tiempos del COVID-19: Concertación social para combatir la desigualdad, de Estíbaliz Montero Mendoza y Garbiñe Espejo Jairo

    EL FUERTE IMPACTO de la crisis sanitaria en el sectores con mayor presencia de mujeres como son los servicios y las trabajadoras de hogar, junto con el cierre de centros educativos y de cuidados de personas dependientes, nos ha arrastrado de manera alarmante de nuevo a las mujeres a los hogares, cuando aún no nos habíamos desprendido del trabajo de los cuidados.

    15/07/2020.
    Estíbaliz Montero Mendoza y Garbiñe Espejo Jairo, secretarias de la Mujer y Juventud y de Acción Sindical de CCOO de Euskadi, respectivamente.

    Estíbaliz Montero Mendoza y Garbiñe Espejo Jairo, secretarias de la Mujer y Juventud y de Acción Sindical de CCOO de Euskadi, respectivamente.

    ESTA SITUACIÓN no ha mejorado con los procesos de desescalada ni una vez levantado el estado de alarma el pasado 21 de junio, sino más bien todo los contrario. Las mujeres lejos de pasar a esa "nueva normalidad", volvemos a encontrarnos en la "vieja y habitual normalidad" que nos impone el patriarcado: sostener las vidas que el sistema no es capaz de proteger anteponiéndolas a nuestros proyectos vitales.

    En Euskadi, vemos como más de la mitad de las trabajadoras y trabajadores que se encuentran en situación de ERTE, el 57%, se ha reincorporado a su puesto de trabajo, siendo esta reincorporación más rápida en los hombres que en las mujeres. Si analizamos el dato por sectores, el 73,9% de las personas trabajadoras de la Industria se han reincorporado a su puesto de trabajo. Por el contrario, la mitad de las personas que se encontraban bajo un ERTE en el sector de los servicios, con mayor presencia de mujeres que hombres, aún no se ha reincorporado. La consecuencia de este hecho a corto plazo se llama mayor brecha salarial de género.

    Con este diagnóstico, desde CCOO de Euskadi, planteamos una batería de propuestas a desarrollar en una primera fase de nuestro diálogo social, marcándonos de forma prioritaria, medidas que favoreciesen la protección social para quienes peor lo están pasando en la actual crisis.

    CCOO de Euskadi ha propuesto medidas específicas con respecto a la protección de las familias, personas trabajadoras que hayan tenido que reducir su jornada para el cuidado de hijos, hijas, familiares contagiados o aislados, así como dependientes. Al hilo de nuestra propuesta, el Gobierno vasco aprobó una ayuda específica para estas situaciones sin llevarlo al espacio del diálogo social. Desde el sindicato fuimos y somos muy críticas con esta ayuda, ya que finalmente no ha recogido ninguna acción positiva que favorezca la corresponsabilidad en la tarea de los cuidados.

    Una segunda propuesta para la concertación social ha sido complementar los ingresos a quienes se encuentran en situación de ERTE, incidiendo en los salarios más bajos y en los contratos a tiempo parcial en los que de manera involuntaria son protagonistas las mujeres y las personas jóvenes.

    Tras duras semanas, conseguimos nuestro propósito, a pesar del posicionamiento de otros sindicatos que lanzan propuestas al aire y a través de los medios de comunicación o que han intentado confrontar el diálogo social negociando con la patronal a espaldas del Gobierno y de la propia mesa de diálogo social.

    Como decíamos, primer objetivo alcanzado. A partir del 1 de julio e inicialmente hasta el 30 de septiembre, aquellas personas trabajadoras que estén afectadas por un ERTE, y tengan un salario anual inferior a 20.000 euros anuales, percibirán un complemento de 150 euros mensuales para los contratos de trabajo superiores al 50% de la jornada, y de 100 euros mensuales para los contratos inferiores al 50%. Esta medida logra complementar entre un 93% y hasta un 100% los salarios brutos, siendo el porcentaje de cobertura más alto cuanto más bajo es el salario.

    Esta primera medida abre el camino para combatir la desigualdad también desde la concertación social, ya que del total de las personas beneficiaras hasta el 70% son mujeres. Este porcentaje crece cuanto mayor es la brecha salarial de género.

    Desde CCOO lo exigimos desde que inició la crisis: ni nadie puede quedar atrás, ni la situación que estamos atravesando debe ser la excusa perfecta para retroceder en igualdad. El conjunto de la organización debe incidir más que nunca a través de la negociación colectiva y nuestra acción sindical para que el #8MSiempre sea una realidad, también en tiempos de crisis sanitaria y económica.

    Estíbaliz Montero Mendoza, secretaria de la Mujer y Juventud de CCOO de Euskadi, y Garbiñe Espejo Jairo, secretaria de Acción Sindical de CCOO de Euskadi.

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