Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 26 abril 2024.

Solidaridad con Mehran Raoof y con los sindicalistas de Haft Tapeh

  • Mehran Raoof lleva detenido en régimen de aislamiento desde el 16 de octubre de 2020 y según informa la Alianza Internacional para el Apoyo a los Trabajadores/as de Irán (IASWI) podría estar siendo sometido a torturas y maltratos en la prisión de Evin. Por otra parte, los sindicalistas del complejo de plantaciones de caña de azúcar de Haft Tapeh en Sush (Juzestán, Irán) están siendo acosados por sus denuncias sobre la situación en esta gran industria azucarera.

Los derechos y libertades sindicales en Irán son atacados de manera permanente. Sindicalistas independientes, activistas sindicales y de la sociedad civil iraní en general se enfrentan a un hostigamiento diario, arrestos, despidos, persecución judicial solo por el hecho de realizar sus actividades sindicales pacíficas y legítimas.

01/02/2021.
Mehran Raoof, profesor y sindicalista iraní detenido

Mehran Raoof, profesor y sindicalista iraní detenido

Durante las dos primeras semanas de octubre de 2020 se produjo una oleada de detenciones de activistas laborales y sociales en Teherán y otras ciudades de Irán. Mehran Raoof, sindicalista, fue detenido en la noche del 16 de octubre de 2020 después de que las fuerzas de seguridad allanaran su domicilio en Teherán. Durante la redada, se registró su casa y se confiscaron su ordenador, su teléfono móvil y algunos otros documentos.

Durante la misma semana en que Mehran fue detenido, también lo fueron más de una docena de otros activistas sociales, políticos, de izquierda y sindicales. Desde entonces, muchos de los detenidos han quedado en libertad bajo fianza pero no es el caso de Mehran Raoof que se ha enfrentado a un trato más duro por parte de las autoridades. Raoof, profesor de inglés y sindicalista, nacido y criado en Irán pero residente durante varios en Inglaterra, con doble nacionalidad británica e iraní, parece estar aún más en el punto de mira de las autoridades.

Sin acceso a defensa legal, sin familia cercana en Teherán, se encuentra recluído en regimen de aislamiento en la tristemente célebre prisión de Evin, del departamento de seguridad de la Guardia Revolucionaria. Debido a su situación y a la tremenda presión que está recibiendo por parte de las autoridades penitenciarias, se teme que puede estar sufriendo maltratos y torturas. Como preso de conciencia, exigimos su inmediata liberación para que Mehran Raoof no siga encarcelado de manera injustificada por más tiempo.

Por otra parte, la situación con los sindicalistas en la empresa Haft Tapeh se complica tras las recientes protestas de los trabajadores de esta empresa azucarera contra la privatización y la corrupción de la dirección. La empresa ha demandado a 28 personas, manifestantes y sindicalistas, ante los tribunales bajo la acusación de alteración del orden público.

Tras la revolución iraní, la mayoría de las organizaciones sindicales perdieron su calidad de organizaciones independientes y libres frente a aquellas que son avaladas por el poder iraní. Aquellas que intentaron resistir y conservar su identidad como organizaciones sindicales independientes fueron señaladas por el régimen de Teherán como “organizaciones de izquierda” y fueron declaradas ilegales. Como resultado de este proceso y el paso de los años se han ido incrementado los problemas para poder crear sindicatos independientes en el país y las sucesivas legislaciones laborales han apoyado al sindicalismo oficialista iraní. Las organizaciones que han intentando resistir tienen serias dificultades para poder presentarse como alternativa a los sindicatos verticales del régimen iraní. Por el contrario, las organizaciones avaladas por el régimen reciben actualmente financiación pública.

El Estado financia a varias organizaciones nacionales de ámbito nacional que están bajo el control del poder iraní y que se conocen con los siguientes nombres inglés/persa: Workers House (Khane Kargar), Workers Islamic Council (Shorahay Islami Kar), Workers Interest Council (Anjomanhay Senfi Kar), Congregation for Workers Representatives (Majmae Omomi Namayandegane Khargaran). Como puede comprobarse en este contexto, el régimen iraní ha creado una serie de “organizaciones de trabajadores” que han ido construyendo un sistema en el lugar del trabajo desde los niveles más locales, provinciales, hasta los estatales que ejercen un control absoluto sobre los trabajadores y les niegan su derecho a crear sindicatos libres e independientes.

Por ejemplo, los trabajadores en importantes sectores de la economía iraní como el petroquímico no están autorizados a organizarse por sí mismos y son organizados de manera obligatoria en estas estructuras que se han mencionado. Se trata de un sistema “triangular” de control que ejerce esa presión en los tres niveles. Pero además y al mismo tiempo, el régimen iraní trata de posicionar a estas organizaciones en el ámbito internacional con diferentes intentos de afiliación a la Confederación Sindical Internacional (CSI).

En el ámbito de la CSI y de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), CCOO ha participado en numerosas ocasiones en la denuncia y seguimiento de la situación de activistas y sindicalistas represaliados en Irán por el ejercicio de su actividad sindical y en el apoyo a las escasas iniciativas del sindicalismo independiente iraní.