Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 27 abril 2024.

LGTBI

8 de Marzo y mujeres lesbianas, bisexuales y trans

    ROSA ARAÚZO, Boti G. Rodrigo, Arantxa Miranda y Diana Cardo fueron las mujeres que ayer ofrecieron la rueda de prensa con motivo del 8 de Marzo en nombre de la FELGTB, para enfatizar, una vez más, que el Día Internacional de las Mujeres ha de contar necesariamente con las reivindicaciones de las mujeres lesbianas, bisexuales y trans.

    05/03/2019.
    Rosa Arauzo, Boti G. Rodrigo, Arantxa Miranda y Diana Cardo.

    Rosa Arauzo, Boti G. Rodrigo, Arantxa Miranda y Diana Cardo.

    EL AÑO 2019 pretende rescatar la realidad de las personas mayores del colectivo LGTBI y preservar su memoria. Es el compromiso de la FELGTB. Hubo, por eso, un recuerdo para las activistas de Stonewall, Sylvia Rivera, entre otras, rememorando que fueron las mujeres trans quienes siempre cargaron con el mayor estigma y también quienes históricamente encabezaron las luchas y reivindicaciones por el bien de todo el colectivo LGTBI.

    Boti G. Rodrigo, ex presidenta de la FELGTB, no quiso pasar por alto: “La memoria oscura del sufrimiento del colectivo durante el franquismo. Luchamos solas, en solitario y de manera heroica: la represión franquista, la reclusión en las cárceles, la represión, la persecución… y, en algunos casos, la muerte”· Los hombres sufrieron palizas, delaciones, destierros, exilios, burlas, penas de cárcel, pero Boti G. Rodrigo también recordó que en el caso de las lesbianas; “Era negada su independencia, su autonomía personal. Sufrieron igualmente cárcel, reclusión y muchos tratamientos psiquiátricos. Pero además sufrieron el peor de los castigos: la invisibilidad”.

    El colectivo LGTBI está preparado para enfrentarse al futuro que se avecina, un futuro muy similar al pasado próximo, según Boti G. Rodrigo: “El 8 de Marzo tiene que contar con nuestra presencia, con nuestras realidades. Hay una parte del feminismo terriblemente transfóbico. Es irreal y es injusto. No vamos a consolarnos con los logros conseguidos. Es tarea de toda la sociedad y también de los medios de comunicación, porque los derechos primero se conquistan y después se protegen. Y como diría Pedro Zerolo a la derecha intransigente: queremos una sociedad en la que quepamos todos y todas”.

    Rosa Arauzo, patrona de la Fundación 26 de Diciembre. Mayores LGTB, explicó que hay que rescatar del olvido la ley de peligrosidad social. Y anunciar al futuro los logros, como por ejemplo la constitución de la primera residencia de mayores LGTB con carácter prioritariamente público. Además relató su experiencia vital: madre de 8 hijos, de los cuales sólo sobrevivieron 6 (una de sus hijas es trans), se separó de su marido, se enamoró de la profesora de música de sus hijos, lo anunció públicamente, perdió a sus amistades y se refugió en el activismo LGTBI y en el feminismo, a los que continúa vinculada a sus 74 años: “He dedicado mi vida a la búsqueda de derechos, a la sororidad, a la solidaridad. No entiendo la transfobia en parte del movimiento feminista".

    Diana Cardo salió del armario con 48 años (tuvo varios intentos anteriormente, pero decidió “esconder su lado femenino”), momento en que decidió explicarle al mundo que se sentía mujer. Con sólo dos años fuera del armario ya sabe lo que es vivir delitos de odio. Sufrió un ataque físico por parte de un hombre por haber entrado al baño de mujeres un centro comercial. Más tarde, tuvo que enfrentarse al sistema sanitario y a la denominada “unidad de identidad de género (antes ‘unidad de trastorno de género’). Se pregunta quién dicta cuál es su género y exige que se acabe con los test de idoneidad: “El 35% de las mujeres cis a quienes les pedí que respondieran al test tampoco lo pasaron. Según sus respuestas, podrían ser trans”. Le preocupa a Diana la discriminación laboral, en su caso es parada de larga duración. Estuvo a punto de conseguir un contrato, pero se topó con lo que llama la “microtransfobia”, tenía aún en el DNI el nombre masculino y la empresa prefirió contratar a otra persona. Además explicó otra violencia, la que sufren las personas trans en las redes sociales: “Es un infierno salir del armario en redes. Hay quienes nos acusan de ser agentes del heteropatriarcado para acabar con el feminismo. Suele negarse nuestra identidad sexual y sufrimos campañas de acoso, de cierres de cuenta. A veces son personas con mucho peso social y y opinan libremente sobre cuestiones refutadas dentro del feminismo hace más de 40 años”.

    Arantxa Miranda, vocal de delitos de odio de la FELGTB, se encargó de recordar las discriminaciones que continúan sufriendo las lesbianas en cuanto a derechos sexuales y reproductivos y la cosificación a la que a veces se enfrentan por parte de algunos hombres: “Las mujeres lesbianas y bisexuales somos concebidas por un amplio sector masculino como objetos sexuales susceptibles de satisfacer todas sus fantasías, mientras que aproximadamente, el 80% de las mujeres transexuales tiene que recurrir al trabajo sexual debido a la discriminación laboral que sufre”. Además, insistió en que las personas trans se enfrentan a la discriminación legislativa cuando deciden cambiar de nombre y las lesbianas cuando deciden inscribir a sus hijos e hijas, han de estar obligatoriamente casadas, algo que no ocurre en las parejas heterosexuales. Pidió asimismo formación en diversidad sexual y de género al funcionariado público y animó a la visibilización:“El machismo también está presente en algunos hombres de nuestro colectivo, por eso, desde el feminismo hay que trabajar para que las mujeres lesbianas, bisexuales y trans tengamos nuestro lugar dentro del colectivo”.

    Carmen Briz es periodista y forma parte del equipo de la Secretaría Confederal de Mujeres e Igualdad de Comisiones Obreras.

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