Confederaci贸n Sindical de Comisiones Obreras | 20 diciembre 2025.

Recortes a la diligencia debida: respuesta sindical en marcha

    18/12/2025.
    En CCOO trabajaremos para sostener el papel de los sindicatos para exigir rendici贸n de cuentas por los impactos negativos de las operaciones empresariales.

    En CCOO trabajaremos para sostener el papel de los sindicatos para exigir rendici贸n de cuentas por los impactos negativos de las operaciones empresariales.

    Desde CCOO advertimos de que la votación esta semana en el Parlamento Europeo, que cerró el diálogo tripartito sobre la Directiva de Debida Diligencia en materia de Sostenibilidad Corporativa (CS3D/CSDDD) y salió adelante con 428 votos a favor, 218 en contra y 17 abstenciones, consolida un repliegue preocupante de la ambición europea en transparencia y control de las cadenas de suministro, justo cuando más falta hace reforzar las garantías para prevenir vulneraciones de derechos laborales y humanos. Para CCOO, este texto representa una "victoria de los lobbies empresariales" que han conseguido diluir obligaciones críticas bajo la bandera de la competitividad.

    En nuestra valoración, el paquete aprobado abre la puerta a más opacidad en el reporte corporativo y a una reducción efectiva de obligaciones de diligencia debida bajo el argumento no acreditado de que el cumplimiento sería “demasiado costoso” o “gravoso”.

    La moratoria de dos años para informes sectoriales retrasa hasta 2027/2028, el reporte detallado en sectores de alto riesgo como el textil, la agricultura o la minería; la simplificación de los estándares europeos de reporte (ESRS) reduce datos exigibles y amplía el margen para que las grandes corporaciones decidan qué consideran “material”; y la ampliación de facilidades para PYMES cotizadas puede traducirse, en la práctica, en mínimos informativos que no permiten seguir la pista de los impactos reales sobre el trabajo y las comunidades.

    La delegación española (61 eurodiputados) votó de forma fracturada, reflejando dos visiones contrapuestas del modelo productivo europeo. En el bloque de la “desregulación”, el PP (22) apoyó unánimemente los recortes en transparencia, alineándose con la patronal europea, y desde CCOO criticamos que haya liderado la presión para evitar obligaciones de información clave, incluida la brecha salarial en subcontratas extranjeras. VOX/SALF (9) votó a favor del desmantelamiento parcial, calificándolo de “burocracia climática”. El PNV (1) respaldó la flexibilización, en sintonía con intereses de la gran industria exportadora. En el bloque de la “resistencia”, el PSOE (20) se abstuvo para evitar que cayera todo el paquete, pero desde CCOO consideramos esta postura insuficiente y decepcionante. Sumar/Podemos/EH Bildu (6) votaron en contra, defendiendo que “sin información no hay acción sindical” y alertando del coste en derechos humanos en las cadenas de suministro. ERC/BNG (3) también votaron en contra, denunciando que la simplificación beneficia a multinacionales frente a los derechos laborales locales y globales.

    La Confederación Europea de Sindicatos comparte la preocupación y, además, pone el foco en el procedimiento político del “Ómnibus I”, que considera alejado de los estándares de mejor regulación en consulta y evaluación de impacto y funcional a intereses corporativos, en un contexto en el que las alianzas parlamentarias con la extrema derecha han resultado determinantes.

    Desde CCOO advertimos de que este tipo de señales pueden tener un “efecto cascada” en los Estados miembros, debilitando futuros desarrollos normativos nacionales, y por ello trabajaremos, en coordinación con la CES, para sostener el papel de los sindicatos en la diligencia debida y exigir rendición de cuentas por los impactos negativos de las operaciones empresariales sobre trabajadores y trabajadoras, sus familias y sus comunidades.

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