Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 25 abril 2024.

LGTBI+

Orgullo LGTBI+ 2019: Al trabajo sin armarios

    EL SÁBADO, día 6 de julio, tuvo lugar en Madrid la manifestación estatal con motivo del Orgullo LGTBI+ 2019. Hace 50 años, en un pub cutre, en un pub frecuentado por gentes de mal vivir, por gentes que no encajaban en la heteronormatividad y hartas de sufrir continuas redadas policiales que solían acabar con detenciones en comisaría, Sylvia Rae Rivera y Marsha P. Johnson decidieron que ya estaba bien, que igual aquello podía arreglarse con el lanzamiento de un zapato de tacón alto contra la policía. Estas dos mujeres trans, racializadas y migrantes no sabían que estaban generando el espíritu de revuelta necesario para hacer reflexionar a la sociedad sobre la discriminación de todo un colectivo.

    10/07/2019.
    #EnClaveVioleta.

    #EnClaveVioleta.

    EN NUESTRO PAÍS se tardó un poquito más. Y quienes se declaraban homosexuales (lesbianas y gais) habían de ocultar su pluma, ocultar sus sentires para encajar en una sociedad en blanco y negro que no permitía estos “desmanes” y que castigaba con la llamada ley de peligrosidad social (que tanto recuerda, por momentos, a la actual ley mordaza). No hablemos ya de las personas trans, los hombres prácticamente no existían o no se hablaba sobre ellos. En el caso de las mujeres trans la cosa no mejoraba: su visibilidad, imposible de ocultar en la mayoría de los casos, ocasionó desplazamientos y migraciones forzosas hacia las grandes ciudades, buscando espacios donde poder vivir y trabajos “en negro” con los que poder ganar en autonomía e independencia. El señalamiento público, el paso por las cárceles o las terapias de “reinversión” eran lo “normal”.

    Y en ese mismo ambiente de miedo y de persecución se gestó también la rebelión, las lesbianas, más conocidas como las “libreras” organizaban fiestas clandestinas y nadie pudo acabar con el cruising (encuentros sexuales en el espacio público) o los clubes a los que tan sólo se accedía a través de una contraseña. En este ambiente, algo desquiciante y donde convivían el placer y peligro, aparecieron los primeros activismos. El pasado sábado portaban la cabecera de pancarta, entre otras personas, y bajo la leyenda: Mayores sin armarios ¡Historia, lucha y memoria! Por una ley LGTBI Estatal: Armand de Fluvià, que “salió del armario” de forma pública en el año 1978, o Jordi Petit impulsor del movimiento LGTBI+ en la clandestinidad y que recorrió platós, junto con Empar Pineda (del Colectivo de Feministas Lesbianas de Madrid) para tratar de explicar a una sociedad aún sin color que había opciones a la heterosexualidad. También portando la pancarta estaban: María Giralt, que se manifestó en Barcelona en 1977 y formó parte de la corriente feminista radical; Federico Armenteros, presidente de la Fundación 26 de Diciembre dedicada a las personas mayores LGTBI+; Olga Alarcón, que continúa dando la batalle en Gehitu; o Carla Antonelli imprescindible para hablar de las realidades trans en este país.

    Se echó en falta en esa pancarta de cabecera a algunas activistas que se dejaron la piel, literalmente, por la defensa de los derechos del colectivo, como Ana Meluska, trans, activista feminista y que falleció en enero de 2017. La actual Escola Sindical LGTBI, organizada por la Secretaria de la Dona, Politiques LGTBI i Institucional por el Grup d’Acció LGTBI de CCOO del País Valencià lleva su nombre “Ana Meluska Cano”, porque éste fue el último grupo en el que hizo activismo hasta el momento de su fallecimiento.

    Y además estuvieron Carmen Cerezales (referente entre las personas sordas) y algo más jóvenes, y portando igualmente la pancarta, Boti G. García, Beatriz Gimeno, Toni Poveda, Jesús Generelo, Uge Sangil, José María Nuñez, Pepa Noya, Juana Ramos, Mané Fernández, Fernando Mosquera, Jesús Santos, Marina Sáenz, Carmen García, Jesús Grande, Miguel Ángel González, Miguel Brox, Pedro Beguería…

    La segunda pancarta la portaban representantes de las organizaciones participantes, entre quienes se encontraban, como en años anteriores, Unai Sordo y Elena Blasco Martín, secretario general y secretaria confederal de Mujeres e Igualdad de Comisiones Obreras, respectivamente. Ambos pusieron el acento en el aspecto laboral, porque cada vez más personas LGTBI+ se atreven a “salir del armario” entre las amistades, en las familias, pero es más costoso hacerlo en el ámbito laboral. De ahí el empeño de Comisiones Obreras –no solo este día sino todos los días del año- por erradicar las situaciones de discriminación y menosprecio hacia las personas LGTBI+ y el velar por la igualdad de condiciones de todas las personas trabajadoras. Esto para quienes consiguieron un empleo. Para quienes ni siquiera llegaron a acceder al mismo, Elena Blasco y Unai Sordo reivindican el primer lugar el acceso al empleo en igualdad de condiciones y oportunidades.

    Elena Blasco entiende que es fundamental continuar avanzando en la legislación como garante de futuros derechos: “CCOO apuesta por una ley estatal LGTBI+ que garantice una esfera sociopolítica sin discriminación, sin desigualdad, sin acoso y sin violencia, donde se conforme un escenario democrático, plural y participativo en donde todas las personas podamos ser, sentir y amar libremente”.

    Más de 50 organizaciones sacaron sus cortejos a la calle acompañados de consignas reivindicativas y aires festivos. Sindicatos y partidos políticos también se sumaron. Comisiones Obreras, a través de su ya conocido #EnClaveArcoiris, lo hizo con una nutrida delegación y en un autobús descubierto que portaba dos leyendas: Con Mayor Orgullo de Ser y Al Trabajo Sin Armarios.

    Hubo quienes quisieron hacerse protagonistas de la manifestación estatal del sábado en Madrid, pero las únicas personas protagonistas fueron, por un lado, las personas LGTBI+ mayores por todo lo que lucharon y, por otro, la gente joven que viene con ganas de continuar empujando para que nadie viva sin derechos, porque, de momento, no los regalan en las tapas de los yogures, hay que ganárselos día a día.

    Carmen Briz (@MamenBriz) es periodista y forma parte del equipo de la Secretaría Confederal de Mujeres e Igualdad de Comisiones Obreras.