Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 25 abril 2024.

La CSTM de Mali denuncia las sanciones contra su país

    En un comunicado dirigido a diferentes sindicatos mundiales, el secretario general de la Confederación Sindical de Trabajadores de Mali (CSTM), Hammadoun Amion Guindo, ha expresado la denuncia que su Comité Ejecutivo Nacional (CEN) ratificó en su reunión ordinaria del pasado martes 11 de enero de 2022 tras el análisis de la situación actual en el país.

    14/01/2022.
    El Comité Ejecutivo Nacional de la CSTM presentando el comunicado [imagen de la CSTM en FB]

    El Comité Ejecutivo Nacional de la CSTM presentando el comunicado [imagen de la CSTM en FB]

    El pasado 9 de enero, la Comunidad Económica de Estados del África Occidental (CEDEAO) y la Unión Económica y Monetaria del África Occidental (UEMOA) imponían sanciones a Mali al considerar que el retraso del paso a un régimen civil en el actual escenario político y de las elecciones inicialmente señaladas para febrero no es aceptable.

    Sanciones que han sido apoyadas por el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres para que "el gobierno golpista maliense presente un calendario aceptable de elecciones y ponga así fin a una transición que ya dura demasiado". La UE se suma a las sanciones bajo la presión de Francia junto a líderes del África Occidental, según ha manifestado el ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Yves Le Drian.

    En su comunicado, el sindicato CSTM se acoge a la Constitución del 25 de febrero de 1992 y a las conclusiones de la fase final de la Conferencia Nacional de Refundación (ANR) en la actual situación política y de seguridad para condenar estas sanciones y "la complicidad y actitud colonialista de Francia en la gestión política de los asuntos internos del pueblo soberano de Malí".

    Por otra parte la CSTM ha afirmado que las sanciones "ilegales e ilegítimas impuestas a Mali tras las cumbres de la CEDEAO y la UEMOA del 9 de enero de 2022 en Accra (Ghana) son sanciones que violan los derechos de los trabajadores y trabajadoras, acentúan la vulnerabilidad de la población y socavan la cohesión social del país". Por todo ello, la central sindical maliense considera fundamental que las autoridades de la CEDEAO y de Francia entiendan que "organizarán sus elecciones para su pueblo y solo para su pueblo pero no para la CEDEAO y menos aún para Francia".

    El experto Dagauh Comenan en su reciente artículo Sanciones contra Mali, ¿cómo está actuando la CEDEAO? en la publicación digital Africaye, señala que las reacciones en Mali han sido muy diversas. "Mali ha contestado al embargo regional con medidas de reciprocidad: cerrando sus fronteras y repatriando a sus embajadores en los países de la CEDEAO. El jefe de la junta maliense, el coronel Assimi Goita, realizó una declaración televisiva calificando las sanciones de “inhumanas” y llamó a la población a la calma y la moderación. Por otro lado, mientras que algunos partidos políticos (incluido el del depuesto presidente Ibrahim Boubacar Keita, derrocado por los actuales dirigentes del país) estiman justificadas estas sanciones, un número de organizaciones de la sociedad civil (religiosas, profesionales y sindicatos) han manifestado su indignación a unas sanciones que perciben como injustas".

    Por su parte, Agencia Efe ha señalado que "el duro bloqueo a Mali para que se convoquen elecciones han acercado las posturas de los partidarios y opositores de la junta militar que está en el poder tras dos golpes de Estado, que rechazan al unísono el bloqueo y se prepara para movilizarse contra ellas".

    La Confederación Sindical de Trabajadores/as de Mali (CSTM) es una de las organizaciones sindicales más representativas del país y está afiliada al igual que la Unión Nacional de Trabajadores de Mali (UNMT) a la Confederación Sindical Internacional (CSI). A pesar de la ratificación por parte de Mali del convenio nº 87 sobre libertad sindical y la protección del derecho de sindicación (1948) y el convenio nº 98 sobre el derecho de sindicación (1949) en 1960 y 1964 respectivamente, las violaciones de los derechos laborales y sindicales en el país han sido una constante y Mali suele aparecer como uno de los peores países del mundo para su defensa en los informes elaborados por la Confederación Sindical Internacional y la Organización Internacional del Trabajo.