Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 1 diciembre 2025.

Los márgenes empresariales registran un nuevo máximo histórico y persiste la brecha entre productividad y salarios

    16/09/2025.
    Los márgenes empresariales registran un nuevo máximo histórico y persiste la brecha entre productividad y salarios.

    Los márgenes empresariales registran un nuevo máximo histórico y persiste la brecha entre productividad y salarios.

    La rentabilidad de las empresas vuelve a registrar un nuevo récord, con niveles previos a la crisis inflacionaria. Sin embargo, la remuneración media por asalariado queda aún muy lejos del margen que obtiene la empresa.

    Los márgenes empresariales vuelven a registrar máximos históricos en el segundo trimestre del año, con un nuevo récord de la rentabilidad media de las empresas, muy por encima a los niveles previos a la crisis inflacionaria. 

    Los márgenes aumentan nuevamente fruto de un mayor incremento interanual de las ventas (+3,3%) que de los costes (+ 3,2%, cuyo principal componente son las compras, +2,7%, y en mucha menor medida los salarios, +5,9%). El desacople entre ventas y compras empresariales producido desde 2023 persiste y sigue generando márgenes elevados evidenciando el poder de mercado de las empresas.

    Por otro lado, los salarios siguen recuperando su peso en el reparto del valor añadido creado, después de haber perdido participación entre los años 2021 y 2022, también provocado por el reparto desigual de esfuerzos. 

    Se mantiene, eso sí, la brecha entre la productividad y los salarios. La productividad aparente del trabajo, que se mide como el valor añadido bruto que genera cada asalariado, sigue aumentando en 2025; en concreto entre 2018 y 2025, ha aumentado en un 43%.

    Los primeros datos para 2025 han confirmado que la recuperación del peso de los salarios prosigue, aunque no se han recuperado los niveles previos a la crisis de la inflación.

    Finalmente, existe una evolución heterogénea por ramas de actividad en el último año, siendo las industrias extractivas, agricultura, actividades administrativas, transporte y almacenamiento las que más incrementan su rentabilidad, que cae, por otro lado, en hostelería, actividades profesionales y actividades inmobiliarias.

    Respecto a 2019, son cuatro los sectores que incrementan estructuralmente su rentabilidad: agricultura y ganadería, electricidad, comercio y reparación de vehículos y hostelería y restauración.